Los llamados disidentes cubanos + dinero = Estados Unidos.

Por Andy Duardo Martín

El verdadero rostro de la disidencia cubana está matizado por los colores de la pintura que identifican la Oficina de Intereses de los Estados Unidos en La Habana. Tanta intromisión y saña muchas veces le hacen caer  en el más puro de los ridículos, como aquella vez que quedaron esperando por el otorgamiento del Premio Nobel de la Paz a dos disidentes, apoyados en la acción propagandística por la Agencia para la Cooperación Internacional de EEUU( USAID), que destinó 250 000 dólares para promover la cara de los candidatos. Finalmente nada ocurrió y los grandes medios de prensa del imperio volvieron a callar.

Financiamiento que para nada es nuevo y se fortaleció cuando en este 2011 el gobierno de la Casa Blanca aprobó 62 millones de dólares en apoyo a la disidencia política aquí. Cuba sigue siendo una prioridad para Washington, malgastan el dinero en tales menesteres mientras la cantidad de pobres en la “gran nación americana” aumentan.

Tal y como dice en un artículo el colega José Manzaneda “Los beneficiarios son mininipartidos de todo tipo, sectas religiosas, colectivos de gays y lesbianas supuestamente “independientes”, bloggers anticomunistas, incluso grupos infantiles “no oficiales”. Los gobernantes estadounidenses niegan cualquier participación en esos asuntos pero la realidad más objetiva demuestra que existen “determinadas partidas gubernamentales directas, tal como lo prueba un cable de la Oficina de Intereses de EEUU en La Habana, fechado en 2008, revelado hace unos meses por Wikileaks pero censurado por los medios internacionales.

Las mal llamadas Radio y Televisión Martí son otros ejemplos de desgaste monetario, corrupción, prebendas y todo cuanto maléfico pueda ocurrir en esa cruzada obsoleta contra Cuba.

Dinero y más dinero, esa es la tónica nada oculta de la política estadounidense contra esta isla del Caribe, pero no en ayudas, mucho menos en préstamos, sí en función de cada una de las burradas que se cocinan por la mafia anticubana radicada en Miami .

Se trata de verdades que conocen pero ocultan los grandes medios. Ellos, dice Manzaneda en su artículo prefieren no informar, o sea, es como reconocer que quienes han presentado a los disidentes a la opinión pública como “opositores pacíficos” o “defensores de los derechos humanos” son, en realidad, lo que en cualquier país del mundo llamarían mercenarios.

http://www.cubadebate.cu/noticias/2011/11/09/eeuu-vs-cuba-la-ruta-del-dinero-video/

Video en Youtube: http://www.youtube.com/watch?v=TmgJ2TXvAZY&feature=player_embedded