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“Comenzó la fiesta verde-azul”(II)

“Comenzó la fiesta verde-azul”(II)

Andy Duardo Martín.

Hace unos días hice referencia a que unos 246 mil vacacionistas serán recibidos en  las instalaciones del Campismo Popular ubicadas en el litoral Norte de nuestra provincia y añadí en aquel momento que  la cifra significa un serio reto, no solo por la cantidad, sino por la calidad que debe predominar en los servicios y en las propuestas culturales, recreativas y deportivas.

En las acciones que han previsto trabajadores y directivos para cumplir con el desafío veraniego me detengo para dar continuidad a un tema de alta repercusión y alcance entre los pobladores, no solo de Mayabeque, también de provincias cercanas como La Habana y Matanzas.

Precisamente teniendo en cuenta las cifras de campistas para los meses de julio y agosto y la trascendencia de una actividad recreativa enraizada ya en la familia cubana, se realizan actividades de capacitación con el personal vinculado directamente a los servicios, algo que me parece muy bien, porque las buenas formas y modales en la atención a los vacacionistas no es asunto de cuenta y vete, sino que amerita de aptitudes y vocación, de aprendizaje en el caso de los más jóvenes, a fin de lograr esa alta calidad a la que se aspira.

Habrá momentos significativos, ya tradicionales, como las celebraciones por  el Día de los niños, el 26 de julio, Día de la Rebeldía Nacional, ocasión en que se realizarán en todas las bases de campismo cenas conmemorativas con la elaboración de platos tradicionales. También se festejarán el Día Internacional de la Juventud, el cumpleaños 87 del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro y el aniversario de la Federación de Mujeres Cubanas.

Los organizadores del verano dos mil 13 en las Bases de Campismo de Mayabeque sugieren además “Aventura y algo más”, una actividad donde vinculan el cicloturismo con la historia, una Jornada de sensibilización con el medio ambiente y para el 12 de agosto “Acampando en mi Isla”, un Festival que vuelve la mirada a lo rústico y tradicional, o sea, a la esencia primigenia del campismo popular.

A los preparativos para los meses de julio y agosto se suma cuanto se hace en mayo y se hará en junio desde el punto de vista de acondicionamiento: higienización, chapea, mantenimientos constructivos, pintura, entre otras  tareas que van cambiando el rostro al litoral Norte de nuestra provincia.

 Si bien la apertura oficial será el 6 de julio ya las bases reciben campista, el movimiento hacia esa zona geográfica es constante, preludio de un verano que se vivirá con mucho calor y alta intensidad en todo, y para todos los que aman ese contraste verde-azul exclusivo de la costa Norte mayabequense, un lugar donde hace ya mucho tiempo, la tierra y el mar se funden, en un abrazo íntimo y atrayente.

 

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